Desayunar pan con aceite de oliva, zumo de naranja y café acompañado con avena o frutos rojos está cada vez más extendido ya que es una forma sana y saludable para empezar el día.
Hoy os contamos los beneficios del pan con aceite de oliva además de dejaros una genial receta de focaccia para que aparte de conocer los beneficios de aceite de oliva podáis ponerlo en práctica de una forma sencilla y deliciosa.
Cada vez más personas adquieren hábitos alimenticios responsables y saludables y buscan productos de mayor calidad, recuperando así en gran medida la dieta mediterránea que siempre nos ha caracterizado y en la que el pan con aceite de oliva tiene un puesto privilegiado, ya que es por todos bien sabido que aporta amplios beneficios así como nutrientes a nuestro organismo.
Beneficios de desayunar pan con aceite de oliva
La propia Fundación Española de la Nutrición (FEN) Señala la importancia desayunar correctamente en sus informes, ya que un desayuno saludable es decir completo, variado y equilibrado ayuda a que nuestro cuerpo vuelva a funcionar tras dormir durante la noche.
¿Qué aporta el pan con aceite de oliva a nuestra salud?
A todos nos han enseñado desde pequeños qué el desayuno es una de las comidas más importantes del día, ya que debe aportar entre el 20 y el 25% de nuestras necesidades energéticas e incluir leche o derivados, frutas, cereales y alguna grasa saludable como aceite de oliva virgen extra.
Además de ser una deliciosa forma de empezar el día, el pan con aceite de oliva aporta con una sola rebanada hidratos de carbono, vitaminas B1, B2, B6 y B9, magnesio, cinc, hierro y potasio ya que el aceite de oliva es una fuente no solo de sabor sino también de salud.
¿Cuántas calorías tiene una tostada de pan con aceite?
Lo primero que hay que decir es que el pan con aceite de oliva crudo no engorda, ya que aproximadamente 100 ml de aceite de oliva virgen extra contienen 824 kcal, principalmente triglicéridos de ácido oleico, linoléico y palmítico, un ácido graso monoinsaturado del grupo omega-9 beneficioso para la salud y cuya principal cualidad es proteger nuestro sistema cardiovascular.
El aceite de oliva también facilita el tránsito intestinal y estimula la secreción de sales biliares para favorecer la digestión, ayuda a reducir el colesterol y nos ayuda a preservar las facultades cognitivas y a estimular la memoria gracias a los beneficios de sus ácidos grasos monoinsaturados.
Además también nos ayuda a mejorar la salud de nuestra piel y protegerla de agresiones externas previniendo así el envejecimiento de las células, por eso es la base principal de nuestra línea de cosmética natural. Aquí te contamos más beneficios del aceite de oliva.
Focaccia de patata con calabaza y chistorra
Dicen que el día se hace más largo sin pan y tienen toda la razón. ¿Por qué nuestros padres y abuelos tomaban pan todos los días y en la actualidad, si tienes más de treinta años raro es que te permitas el lujo de comer carbohidratos todos los días? Cocina tu propio pan con aceite de oliva en casa, notarás la diferencia y para eso te dejamos esta fantástica receta de pan con aceite de oliva:
Una receta deliciosa y muy mediterránea, que recibe distintos nombres según el país donde se haga. La focaccia o más conocida en España como coca o torta, es un pan con aceite de oliva al que antes de cocer, se le añade algún ingrediente que complete la explosión de sabores en el paladar, como siempre hace el pan.
INGREDIENTES:
- Biga
- Harina panificable 140grs
- Agua 65 grs
- Levadura fresca 2grs (0´7 grs de levadura seca)
- Masa
- Biga 207grs
- Harina panificable 450grs
- Agua 330-350 grs
- Patata cocina y hecha puré 100grs
- Sal 12 grs
- Levadura 7 grs
- Relleno
- Calabaza picada fina 130 grs
- Chistorra desmenuzada 130 grs
- Queso feta 50grs
- Aceite de Oliva Virgen Extra, para manipular la masa
PASOS:
1. La biga hay que prepararla como mínimo el día anterior, mezclando los ingredientes y amasándolos durante un par de minutos. Reserva la bola densa en la nevera dentro de un recipiente tapado y la podrás utilizar cuando te convenga, de uno a tres días. Tras la fermentación la biga tendrá un aspecto esponjoso y desprenderá un aroma un poco ácido.
2. Mezcla todos los ingredientes de la masa y deja que repose un cuarto de hora. La masa se habrá vuelto menos pegajosa. Ve estirando buenas porciones de la masa y doblándolas sobre si mismas, hasta unas diez veces.
3. Deja que repose 5 minutos y vuelve a repetir la operación, hasta 3 veces.
4. Vuelca la masa en la bandeja de horno que vayas a utilizar, untada de aceite.
5. Con cuidado de no desgarrar la masa, estírala y pliégala una y otra vez. Con ello conseguirás que la masa adquiera estructura. A medida que se van creando las burbujas de gas, se van estirando para conseguir una alveolatura irregular.
La alveolatura se produce durante el proceso de fermentación del pan, porque las bacterias se alimentan de los azúcares naturales de las harinas, acompañando al gluten en su proceso de extensión y producción de gas. Ese gas se queda atrapado dentro de la masa, creando agujeros asimétricos en esta, llamados alveólos.
6. Volviendo a la receta que nos traíamos entre manos, deja reposar media hora y vuelve a repetir la operación de pliegues para posteriormente, dejar que la masa fermente otra hora.
7. Pasado el tiempo, forma la masa en una bandeja untada con abundante aceite, es mejor que sobre porque la focaccia lo absorberá y si le falta, se pegará. Pliega los extremos hacia el interior, hasta que se encuentren en el centro y dale la vuelta para que el pliegue quede abajo.
8. Unta la superficie de la Focaccia con aceite de oliva y presiona la masa varias veces con los dedos, apretando hasta tocar la fuente y ve estirando la masa, para que ocupe toda la bandeja.
9. Deja reposar otros diez minutos y vuelve a repetir la operación, intentando incidir en los mismos agujeros que has hecho previamente.
10. Distribuye el relleno por la superficie, incluyendo las especias que quieras añadir, apretando con los dedos para que cuando se cueza la masa se fusione con los ingredientes y al partirla una vez hecha, no se despegue.
11. Se introduce en el horno, previamente precalentado, 10 minutos a 250 ºC con mucha humedad (vierte medio vaso de agua en otra bandeja metálica muy caliente) y otros 25 minutos a 200-210 ºC, ya sin la bandeja del agua.
12. Para que la base quede crujiente, hay que colocar la bandeja los últimos 15 minutos en la parte inferior del horno, y listo.
La focaccia es un pan con aceite de oliva muy versátil que casa con multitud de ingredientes siempre con un resultado magnífico, pan con aceite de oliva muy fácil de hacer y sobre todo casero, ya que no nos olvidemos que los ingredientes que se utilizan en el pan industrial, pese a estar aprobados y legislados, nos reconocen que no son del todo sanos, además de que su durabilidad es ínfima.
En Origival seguiremos abogando por los productos 100% naturales, compartiendo recetas de cocina en las que el Aceite de Oliva Virgen Extra sea fundamental para llevar a cabo cada creación gastronómica y en esta ocasión, el protagonista es el pan con aceite de oliva.